Les traigo nuevamente un capítulo, éste es el capítulo donde se enfrentará a la mas temida criatura, el final es algo especial más espero el agrado de ustedes mis lectores. Les invito a comentar que tal les pareció este largo capítulo (el más largo hasta ahora) y pues aun no termina el Tomo I Pues espero concluir en la siguiente publicación, un saludo!
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-Dan, tu puedes... Debes encontrar a tu guía y vencerás...
En la oscuridad de aquella tenebrosa cavidad en una roca extraña, una bestia descansaba: su enorme tamaño, su denso pelaje atigrado, su mirada sanguina y hambrienta de carne viva harían caer al más bravo guerrero que las tierras del Valle Verde jamás conocería. La criatura alzó su cabeza, que descansaba sobre sus patas delanteras, y mirando fijamente hacia la lejanía logró una extraña mueca, como si sonriese...
[2:1] Al poco tiempo, una pequeña luz comenzó a brillar, y ésta intensificándose comenzó a formar una figura humana, lentamente la luz se tornó en una oscuridad, hasta desaparecer, quedando en el suelo, meditando el joven Dan. Poco después abrió los ojos al sentir el frío del nuevo lugar, observó con serenidad su alrededor: paredes, techo, suelo, grietas; concluyendo observo sus manos, después sus piernas, fijándose su mirar ahora en el saco hechizado.
Abriendo el saco observó lentamente el interior, y en el espacio alterado logró ver y después tomar una armadura ligera, botines de guerra, después un arco y una Aljaba llena de flechas, los cuales colocaría tras su espalda colgando, un par de mitones de cuero duro lleno de escamas y por último dos pares de dagas afiladas, unas curvas y otras rectas.Se preparo colocando la armadura sobre su cuerpo, los botines ajustaron a la perfección al igual que los mitones, dio un ultimo vistazo al saco y un extraño amuleto le hizo contemplar, lo tomó y lo colocó en su cuello bajo su armadura resistente, ligera y flexible.Se dispuso a caminar, más cada paso que daba el calor aumentaba, un calor tan poderoso que incendiaba el corazón de cualquier guerrero, de sólo un guerrero verdadero.
La bestia despierta, comenzó su camino lento por sus dominios impuestos por los seres "envidiosos", sintiendo el rastro de un intruso, más su calma era igual a la del joven que caminaba al encuentro, por fin al estar frente a frente, el Poith contrajo su rostro cual sonrisa macabra y burlesca, mientras Dan solamente tomó el arco de su espada, que reposaba dentro de la aljaba, al igual que la primer flecha.
-Se muy bien que entiendes el idioma del hombre, y ahora te digo: O te rindes o pereces bajo mis manos.
La bestia expulsó aire con aquella mueca grotesca, simulando una especie de risa burlona, al terminar le vio a los ojos y una voz resonó en la mente de Dan.
-Escucha cachorro de hombre, por tu arrogancia te devoraré vivo, nadie se acerca así al Poith tan seguro ni menos un cachorro como tu...
Dan no esperó más, tensó la flecha en el arco y apuntó a la cabeza del Poith, saliendo disparado el proyectil. La bestia no se movió, dejó impactar aquella flecha la cual se despedazó rápidamente sin penetrar su piel resistente; rápidamente se lanzó hacia el joven y le embistió haciéndole volar tres metros. Dan recibiendo el impacto intentó levantarse más terminó tendido en el suelo una vez más por el dolor, tomó fuerza junto a una flecha, y tendido al suelo apuntó al Poith acertándole al pecho, más nuevamente no penetró el pelaje del animal. Nuevamente la bestia se lanzó sobre Dan, colocando su enorme pata sobre el pecho de Dan y tras arrastrarlo por el lugar le presionó fuertemente; con dificultad lograba respirar el muchacho, en un intento por liberarse, tomó una de las flechas de las pocas que le quedaban tras la barrida recibida, la clavó sobre la pata que lo oprimía, no funcionó, tomó otra flecha en mano e intentó clavarla sobre la cabeza que, cerca de él, pensaba devorarle, más falló y le rasgó levemente un ojo, haciendo que retrocediera la criatura...
Un punto débil había descubierto, más ¿bajo qué costo? Su armadura había sido desgarrada totalmente, las flechas se habían dispersado dejándole solo una a su disposición. Por última vez tomó la flecha y tensando el arco apuntó al ojo izquierdo del Poith, salió disparada más reaccionó aquel animal evitando recibir el impacto y se lanzó nuevamente sobre el joven guerrero, zarpando parte del vientre le causó un inmenso dolor, que de no haber dado un salto hacia atrás le hubiese partido en dos.La sangre brotaba de Dan, y al ver como la sangre caía tubo una idea. Tomó las dagas que había guardado junto a las flechas en su contenedor y se lanzó tras la bestia, lógicamente no sucedió mucho, el animal dio un cabezazo tirando al joven, y nuevamente colocando su enorme pata le presionó contra el suelo, ésta vez sin alguna armadura que le protegiera parcialmente, el dolor era intenso por la presión y la hemorragia, el pensar del valiente se tornaba en blanco, más rápidamente con sus manos apretó el suelo y lanzó tierra a los ojos del Poith, éste soltó un chillido y dio unos pasos hacia atrás. Dan, recobrando el aliento, tomó las dagas del suelo y se puso de pie para lanzarse sobre la criatura, el filo curvo de las armas se clavaron sobre el pelaje incortable, y como ganchos se impulsó hasta estar en el lomo de la bestia; El Poith sintió al intruso y de inmediato comenzó a correr y a azotarse sobre los muros más no lograba deshacerse del parásito; al fin sobre la cabeza del animal, Dan sacó una de las dagas rectas de uno de los botines de guerra y la clavó sobre el ojo derecho del Poith, sangre brotó al retirar el filo de la cabeza, después fue clavada nuevamente sobre el otro ojo cegándole por completo; una sacudida del animal lanzó al joven por los aires y le hizo caer fuertemente dejándole inconsciente. El Poith ya reconocía el aroma del impertinente que lo cegó, y con su olfato se acercó a él, sonrió nuevamente antes de siquiera pensar en terminarle la vida.
-La vida corre rápidamente, la muerte efímera se desvanece... El amor guía al corazón, el odio alimenta la venganza... Un cielo nuevo se abrirá el día que la tierra se corte bajo la espada de Crox y la liberación de las almas será perpetua y ajena al cuerpo...
-recitó una voz femenina que resonó en el lugar- Tu vida termina, bestia, bajo el conjuro de Manraag tu ser será destruido y purificado...
-¿quien eres?
Una luz extraña cubrió al Poith, haciendo que las marcas atigradas de su pelaje se separasen, creando dos lobos diferentes de menor tamaño: uno negro y otro rojizo, éstos ciegos de un ojo contrario y al instante colapsaron en el suelo, la extraña voz que lanzó el poderoso conjuro no se volvió a escuchar, y Dan en un sueño profundo yacía tendido sobre el suelo...
El tiempo no tuvo piedad dentro de aquel lugar, un hada se había escondido dentro del saco hechizado, y tras terminada la batalla ésta se asomó, al ver a Dan tendido se acercó y bailoteando una danza logró abrir una brecha entre el suelo del lugar y el del Bosque donde ella habitaba, logrando pasar las raíces hasta aquel lugar, y pequeñas raíces cubrieron la piel de Dan, manteniendolo con vida al alimentarlo en su letargo de 15 meses...
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